Desde hace más de doce años, los operadores jurídicos venimos demandando una Ciudad de la Justicia para Cádiz que agrupe todas las sedes judiciales existentes en la capital. No como ahora, que lo mismo estamos encima de un mercado que debajo venden caracoles y sardinas, como en otros, donde el fútbol y los espectáculos acompañan a la justicia tanto social como civil o penal, sin olvidar que también encima de un supermercado se celebran bodas civiles y podemos comprobar cómo los novios suben en el ascensor a la vez de quien va a registrar un nacimiento o un detenido por cualquier presunto delito cometido al respecto.
El proyecto de la Ciudad de la Justicia compete a la Junta de Andalucía y de esto han sido tantas las promesas y las mentiras que todavía tenemos un cartel en la calle Tolosa Latour y Brunete, el cual fue en su día propiedad de la Diputación Provincial con una superficie de 10.300 m2 y una posible edificabilidad total de 30.900 m2 sobre rasante, donde dice “aquí se construye la ciudad dela Justicia”.
Dicen que el proyecto básico fue entregado el 19 de Enero del año 2012 para su correspondiente licencia de obras por parte del Ayuntamiento y que la inversión prevista es de 81.992.138.- euros que se financiarían con fondos presupuestarios, pero que dada la envergadura del mismo se está valorando la posible inclusión que llevaría entre las actuaciones a desarrollar mediante fórmulas de colaboración publico-privadas. En resumen, ya están todos los pasos realizados tras permutas con Diputación y el INEM de la configuración del solar definitivo, pero que estos 82 millones de euros no llegan por mucho que protestemos y por mucho que alcemos la voz para su construcción, lo que no cabe duda es que los profesionales del Derecho nos sentimos engañados y dadas las dificultades de las empresas privadas para conseguir créditos y acometer estas obras, la Consejería de Hacienda y Administración Pública no ha dado hasta el día de hoy ni un solo euro.
La Justicia no interesa a todos, sin embargo, todos la critican, la juzgan como lenta, complicada y obsoleta, pero si queremos no estar dando vueltas por Cádiz como aquél programa de “conozca usted a sus vecinos”, urge una Ciudad de la Justicia que convencido estoy que al hacerse ya llegará tarde, pues doce años de espera con un solar empantanado en el corazón del Barrio de San Severiano es un despropósito para los gaditanos y que hoy tras la marcha de Griñán al Senado (por cierto compañero mío enla Comisión de Empleo y Seguridad Social) la actual Presidenta que se coló de rondón como interina, Dña. Susana Díaz (también antigua compañera en el Senado y en la misma Comisión), algo tendrá que decirnos, pues de lo contrario y al paso que vamos, lo único seguro que tenemos es que allí celebraremos EL JUICIO FINAL.